jueves, 15 de abril de 2010

un plano de Desplechin


El que cierra la escena de la autopsia, la escena en la que un profesor practica una autopsia con sus alumnos. Un poco antes el profesor ha dicho: si no os gusta esto podéis cambiar de carrera. Entre los alumnos está Amalric, que no abrirá la boca en toda la sesión salvo para vomitar. (Es la primera aparición de Amalric en el cine de Desplechin).

Entonces llega el plano (que dura sólo unos segundos): el profesor dice –grita, más bien–: que sea la última vez que alguien llora o vomita, se da la vuelta y se va. Y conforme se da la vuelta, los alumnos intercambian miradas de complicidad, uno silba (como diciendo: ¡qué duro el tío!, y Amalric, maravilloso, abre una lata de cerveza, mientras otro se le acerca abrazándole. La lata de cerveza no la abre de cualquier manera: la espuma rebosa de la lata.

Y Desplechin, con su talento para filmar grupos y para filmarlos por separado, filma la diferencia que hay entre ellos y el profesor: que ellos, por supuesto, todavía pueden cambiar de carrera porque ellos, a diferencia de él, tienen la vida por delante.

Sin la lata de cerveza, la escena no sería igual.

Hay otros detalles de este tipo en el cine de Desplechin, cada vez más novelesco desde su segunda película, como si además de estar contando historias muy complejas (y muy escritas) estuviera también contando lo que sucede en la vida (pensamos en Renoir, en Pialat…) –véase también la maravillosa escena en que Emmanuelle Devos trae a Emmanuel Salinger a casa de su padre–: la convivencia, las relaciones humanas…

Ps: Todo esto sucede en La Sentinelle, película de 1993

1 comentario:

  1. No sé por qué se graba, pero el caso es que se graba (puede hacerse el experimento preguntándole a cualquiera a la salida del cine, que diría Pablo) eso del "talento para filmar grupos p o r s e p a r a d o". No es cualquier cosa...
    Mi primer desplechin fue Comment je me suis disputé, VHS inaudible y luego emisión satélite de un canal de pago francés (había que aguzar porque si no lo habías oído no pasaba otra vez.) Bien, se me grabó algo de la escena de la brasserie, primeras secuencias de grupo (pero vistas desde fuera, un poco como en Las flores de Shanghai, en Hou), y sobre todo se me grabó el paseo nocturno a la salida de la brasserie, con música (¿Vivaldi?) superpuesta. Son dos grupos que caminan por la misma acera uno delante de otro. Transmiten una euforia extraña, documental. Hay algún elemento "lanzadera", no recuerdo si Amalric, alguien que va de uno a otro y la cámara le sigue o no (yo diría que es a hombro, ni steady) en cambios de ritmo no precisamente bruscos, un cruce extraño entre Pialat y Truffaut, pongamos, aunque ya estábamos sobre aviso tras los títulos de crédito "venecianos" (increíbles!!) y el arranque Woody Allen (como lo oyen). Es talento, sí.

    ResponderEliminar