martes, 14 de diciembre de 2010

A brighter summer day (Edward Yang, 1991)



Una tarde. Hace mucho tiempo. Un niño y sus padres. Sábado por la tarde. Los padres van a salir. El niño se quedará en casa con su abuela. El niño les pide a sus padres que le traigan una diligencia de playmobil. Porque sí. Porque los niños hacen esas cosas. Porque prefieren que los padres se queden con ellos a jugar. El niño tiene ya algunos playmobil. No es un niño pobre. Es un niño de clase media de una ciudad de provincias. Empieza a jugar. Tiene vaqueros. Tiene caballos. Tiene soldados. Tiene un fuerte que le trajeron los reyes esas navidades. Empieza a jugar. Se inventa una historia. La historia terminará cuando lleguen sus padres con la diligencia. La diligencia en la que huirán dos vaqueros, únicos supervivientes de otra epopeya del oeste. El niño juega y espera. Por fin, vuelven sus padres. El niño hace tiempo que ya ha cenado con su abuela, tortilla de patatas. Suena el timbre. Corre a abrir a sus padres. Las manos vacías.


Cuento esta historia porque el cine de Edward Yang está hecho de estas cosas. Lo intangible. En la película hay una secuencia muy parecida en que los padres salen y prometen a su hija pequeña traerle chicles cuando vuelvan. Por supuesto vuelven con las manos vacías. Puede parecer extraño contar esta secuencia aparentemente insignificante en una película de cuatro horas. Pero es un momento que se queda grabado como muchos otros.


Hablar de todo lo que cuenta la película parece casi imposible. Cada personaje, cada escenario, cada frase, cuentan. Hay que verla. Hay que verla porque es de esas películas que por su lucidez, su amplitud y contención, desafían soberanamente cualquier teoría, cualquier enfoque técnico o de estilo, de esas que están más allá. El cineasta preferido de Edward Yang es Mikio Naruse.

Vienen a la mente los sabios versos de Auden: About suffering they were never wrong / the Old Masters: how well they understood / its human position; how it takes place / while someone else is eating or opening a window or just walking dully along… Muchos de los momentos centrales y más dolorosos de la película ocurren en plano general (qué objetivos, me pregunto, habrá utilizado), mientras que en otra parte del encuadre, en segundo término, serenamente la vida continúa.

Me permito, no obstante, contar una secuencia.

El momento en que Cat, hacia el final, le graba una cinta a su amigo Xiao Sir, que está en la cárcel. No sé si es un plano secuencia, pero me gusta recordarlo así.

Cat se acerca a una especie de puesto desde lejos mientras suena la voz en off. Cuánto me gustaría reproducir íntegramente el texto, pero habrá que esperar a que la película salga en dvd (el espectador tenía ganas de comprar el libro recientemente publicado por Frodon sobre Yang, con la esperanza vana de que apareciera el monólogo, con la esperaza vana de que el libro hablara un poco de cine…).

En la cinta Cat le dice a su amigo que la grabación que hizo de Are you lonesome tonight (Elvis es el ídolo de Cat. Cat le había pedido a la hermana mayor de Xiao Sir que le transcribiera la letra de la canción) se la ha enviado al propio Elvis y que éste le ha contestado que le ha gustado y que estaba asombrado de que sus canciones fueran conocidas en una pequeña isla. Cat deja la cinta y se aleja.

Entonces el militar del puesto coge la cinta con el mensaje y la tira a la basura.


Ps 1: en el libro de Frodon, no todo es malo. Hay testimonios sobre Yang. Hay gráficos de lo que iba a ser su última película The wind, de dibujos animados. Hay una lista de “modelos” que escribió Yang en 2003. Entre otros, están, Bethoveen, Bob Dylan, Maria Callas, Robert Bresson, Tezuka o Bill Clinton…

Ps 2: Cat, http://www.youtube.com/watch?v=PwdGuwv7BfM&NR=1

5 comentarios:

  1. Hacia el minuto 1:39, no es un plano secuencia. Son dos planos. Cuando el plano comienza, Cat ya esta en el encuadre. Cuando deja la cinta, se va hasta que desaparece al fondo.
    Y entonces llega el plano de la cinta arrojada a la basura.
    Qué es eso?
    Mierda.
    http://www.youtube.com/watch?v=N8XWnYjZKBs&feature=related

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  2. De la foto que acompaña el texto me emociona esa mano encima del hombro, en ella está lo que cuentas de la película, en ella creo que está lo que busqué en un parque en París y en un equipo a la deriva en Buenos Aires.
    Recuerdo ahora, pero lo recuerdo a menudo: "milagro de nuestras manos vacías, dar lo que no poseemos".
    Esa mano en el hombro es una mano vacía dando confianza. Bien vale una diligencia.
    PGC

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  3. A brighter summer day siempre ha sido una de mis películas preferidas entre aquellas que todavía no he visto. Puestos a hacer listas, cosa que por ahora no hacemos en El Diablo, propongo la de nuestras películas preferidas que no hemos visto, o la lista de mejores películas que nunca he visto.
    Por ejemplo:
    Los amantes crucificados
    Nazarín
    Una mujer bajo influencia
    A brighter summer day
    Ligeramente escarlata
    Todos los otros se llaman Ali
    Zvenigora
    El maestro de marionetas

    bueno, ahora no se me ocurren más porque en los últimos tiempos me he ocupado de Make way for tomorrow, Monsiuer Verdoux, Steamboat roude the bend y Trouble in Paradise.

    PGC

    bueno, ahora no me acuerdo de más, pero ya b

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